La misión de AIB es proteger el motor que conduce la innovación que permite el suministro por parte de sus miembros las semillas que el mercado desea. Para proteger los derechos del obtentor sobre las semillas hortícolas, AIB ayuda a sus miembros a prevenir y perseguir los casos de piratería en semillas.
De este modo AIB ayuda a mantener la integridad del proceso de protección de la PI de los obtentores vegetales para ser justos con las decenas de miles de agricultores que están usando semillas protegidas y que se atienen a respetar los derechos de los obtentores, marcas registradas y los derechos de autor. La mayoría de los agricultores quieren la igualdad de condiciones y se oponen a una competencia desleal de terceros. Para conseguir su misión, AIB mantiene unos vínculos estrechos con organismos nacionales e internacionales encargados de la aplicación de la legislación.